| Obra |
Puente peatonal Sant Pere Sacarrera
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| Diseño |
Xavier Font. Alfa Polaris, S.L.
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| Constructora |
Excavaciones y Construcciones Benjumea, S.A. Taller estr. metálica: Centrimetal, S.A.
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| Cliente |
Diputació de Barcelona
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| Ubicación |
Mediona, Barcelona, España
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| Ingeniería |
Xavier Font. Alfa Polaris, S.L.
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| Período |
junio 2011 - mayo 2012
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| Presupuesto |
345.100€
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| Fotografía |
Xavier Font
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| Web |
bierot.net/home.htm
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Hemos presentado ya varios proyectos de pasarelas de Xavier Font en estas páginas, por lo que no será necesario volver presentar al autor (Ver: Pont Trencat, Pasarela Can Gili; Puente Peatonal Joan Camps, Puente Peatonal Callus). Como en las otras oportunidades Xavier Font nos pone frente a la evidencia que un buen diseño de puentes o pasarelas no ha de incursionar en el exceso, sino que, por el contrario, lidiando con muy pocos elementos (el tablero, la viga, sus puntos de llegada y el espacio que con ellos conforma) se construyen lugares, nuevos lugares en un territorio ahora conectado. Aclarado el concepto básico del diseño, Xavier Font se concentra en la resolución de los detalles y lo hace con una pulcritud y precisión que conmueve. Los pocos elementos mencionados son depurados hasta los límites de lo posible. Esta depuración que pareciera surgir de un proceso iterativo, elimina todo lo superfluo y alcanza una perfección propia del destilado: lo que queda no es el fruto, es la esencia del fruto, es su espíritu. No conozco el proceso proyectual de Alfa Polaris, pero me encantaría asistir a la generación de uno de estos proyectos: tal vez podamos compartir un día los bosquejos que lo acompañan, aunque -es cierto- asumo que pertenecen a lo que los creadores a veces guardan con secreto y pudor. Veamos este caso. La disposición en el terreno, el cruce ligeramente diagonal, el trazo de los senderos y el mirador con que remata en un extremo mientras en el otro se acopla al sendero que viene del pueblo, hablan de un acercamiento sensible y unos objetivos precisos que incorporan el control de las pendientes para la inclusión y la accesibilidad universal. Para visualizar esto valen las maquetas virtuales que describen con precisión las cotas de nivel. Es notable esa viga Warren de altura sutilmente variable cuya intención va dirigida al pasante: describe una contra flecha amistosa que trasmite certeza, seguridad. Las diagonales de la celosía se diferencian: unas son parejas de perfiles que se sitúan por el exterior de los cordones mientras las otras son simples y están incluidas en su plano. Los pasamanos y barandas de acero inoxidable se complementan discretamente con el acero corten de la estructura, se insinúan, se hablan, se acercan pero no se tocan. Pero la escala del detalle es mayor y se aprecia. La geometría precisa de los cortes, los ángulos ligeramente agudos, la utilización del material en crudo (debería decir de la materia), en fin, una precisión casi quirúrgica que podría sugerir una cierta frialdad o distancia casi agresiva, resulta en un todo amigable, cálido, casi sensual (ni hablar de la iluminación, siempre un complemento sutil, una luz como satinada…). Parece un misterio, pero no lo es. Es el resultado de un trabajo que apela lo esencial del puente, a su arquetipo, a la necesidad de vincular riberas, de cruzar, de posibilitar el encuentro, en suma, que comprende que el acto de cruzar convoca a las personas y las sirve y que el puente cruzado es el instrumento de este acto. Es arquetípico el puente, pero es más fundamental la necesidad de cruzar, la vocación de encuentro. Es el resultado de un trabajo que ha comprendido las leyes y secretos de los materiales que convoca. El acero corten y el acero inoxidable, el hormigón y la piedra, cada uno presente y entendido en su justa y esencial medida, una medida que habla, también, de persistencia, de durabilidad. Usados como están podrán perdurar y dar testimonio de esta mirada a las generaciones por venir y será gracia.
F. Pfenniger
Tipología
Estructura continua de dos vanos con doble celosía lateral tipo Warren y tablero inferior de 38,7m de longitud, con un vano principal de 30,9m de luz y un vano lateral de 7,8m integrado en el estribo lado norte.
Materiales principales
- Tablero principal y plataforma balcón: acero Corten
- Estribos: hormigón armado
- Pavimento sobre tablero: madera sintética polimérica
- Pavimento accesos: losas prefabricadas de hormigón
PASARELA DE PEATONES SOBRE LA VARIANTE DE LA CARRETERA BV-2136 EN SANT PERE SACARRERA
1. Introducción
Sant Pere Sacarrera —un pequeño núcleo rural de habitantes perteneciente al municipio de Mediona, de la comarca vinícola del Alt Penedès en Catalunya— está situado sobre la carretera provincial BV-2136, que lo cruza a través de sus estrechas callejuelas. El continuo incremento del tráfico de vehículos pesados a través de esta vía tuvo como resultado un gran aumento de la peligrosidad y las molestias para los vecinos, lo que finalmente impulsó la decisión de la Diputació de Barcelona, organismo titular de la carretera, de construir una variante exterior por el lado sur del núcleo de población. Debido a la orografía del lugar, la traza de la nueva variante tenía que circular en trinchera a lo largo de casi todo el recorrido, formando así una barrera entre el centro urbano y un área boscosa que tradicionalmente ha sido una zona de recreo para los habitantes del lugar. Por ello, además del encargo del proyecto de la nueva variante, la Diputació de Barcelona también licitó la redacción del proyecto de una pasarela de peatones y bicicletas sobre la traza por donde iba a circular aquella, encargo que fue adjudicado a Alfa Polaris.
2. Diseño conceptual
El objetivo principal de nuestro proyecto era, pues, establecer una conexión para peatones y bicicletas entre el núcleo de Sant Pere y la red de caminos y senderos de la mencionada zona boscosa. La considerable pendiente de los caminos y senderos actuales ha hecho que hasta la fecha el acceso a través de ellos haya estado vetada a las personas con movilidad reducida. Por ello, la realización de nuestra obra podía suponer una oportunidad para ofrecer a estos potenciales usuarios con limitaciones la oportunidad de disfrutar de unos paseos que hasta ahora no les eran accesibles.
Además de ofrecer a los usuarios una experiencia de uso placentera, el cliente quería realizar una obra de diseño cuidado que también mejorase la experiencia visual de los usuarios de la variante, rehuyendo, sin embargo, de soluciones ostentosas. Se pretendía conseguir una obra con una inversión inicial contenida y de bajo mantenimiento. Ello se consiguió con el diseño de una estructura de celosía de acero Corten, muy eficiente desde el punto de vista estructural y con un muy bajo mantenimiento al no tener la necesidad de ser protegida contra la oxidación. El empleo del hormigón armado para los elementos estructurales en contacto con el terreno, la utilización de tarima de madera sintéticas —fabricada a partir de productos reciclados de madera que se mezclan con una matriz polimérica— para el pavimento de la estructura, y la elección de la tecnología LED para el alumbrado, completaron el conjunto de medidas que permiten garantizar un mantenimiento de muy bajo coste.
Nuestra propuesta consistió en un itinerario formado por un camino que saliendo del núcleo del pueblo, al final de la calle de Dalt, sube en sentido sudoeste hasta conectar con el llamado camino de Roca Aguilera. A pocos metros del comienzo, en el lugar donde este itinerario se veía interrumpido por la nueva variante, se proyectó la construcción de una pasarela peatonal por encima de aquélla. Unos metros más adelante, a la izquierda se materializó un ramal a través del bosque en forma de sendero, que conecta con el sendero que hasta ahora salía desde la calle de Baix en sentido hacia el sureste, itinerario éste que también resultó cortado por la nueva carretera.
Los criterios básicos para el diseño de los nuevos itinerarios fueron los siguientes:
Limitación de la pendiente máxima del 7% y trazado en planta que se adaptase lo más posible a la topografía existente. De esta manera se reducían al máximo los movimientos de tierras necesarios, y por tanto su impacto visual.
La anchura funcional de la plataforma del itinerario principal (entre la calle de Dalt y el camino de Roca Aguilera) variable según el tramo: entre la calle de Dalt y la pasarela la anchura se estableció en 3 metros; sobre la pasarela la anchura funcional varía entre 1.5 y 2 metros, y desde ésta hasta el camino de Roca Aguilera la anchura es de 2.5 metros.
Anchura de la plataforma del ramal en forma de sendero se fijó en 0.6 metros.
La limitación de la pendiente máxima obligó a concebir una pasarela que presenta un cierto esviaje respecto a la traza de la variante. La estructura del su tablero es de una tipología de viga continua de 38.7 metros de longitud total, de dos tramos, el principal sobre la nueva variante, de 30.9 metros de luz, y el lateral, de 7.8 metros, que queda integrado en el estribo norte. Este estribo incorpora unas rampas que permiten levantar ese lado del tablero; de esta forma se pudo cumplir con las condiciones de gálibo de la carretera y al mismo tiempo reducir su pendiente longitudinal, impuesta ésa por la considerable diferencia de nivel que hay entre los dos lados de la trinchera de la nueva variante.
El tablero de la pasarela está formado por dos vigas longitudinales de celosía triangular tipo Warren, unidas en su cordón inferior por unas vigas transversales. Las diagonales de las celosía presentan la peculiaridad de estar constituidas por dos familias de elementos que se alternan longitudinalmente, de manera que una familia está formada por parejas de barras unidas a cada lado de los cordones por el exterior de éstos, mientras que la otra familia esta formada por barras únicas unidas a los cordones dentro de su plano de simetría, proporcionando al conjunto un expresividad formal muy acusada.
En planta, el tablero presenta una forma esviada y su anchura varía, siendo más estrecha en el estribo norte. El canto de las jácenas también varía pero de forma inversa a la anchura del tablero, de modo que en el estribo norte, donde la anchura de éste es mínima, el canto es máximo, y sobre el estribo sur el tablero toma la máxima anchura mientras que el canto es mínimo. Con esta especial configuración se pretendía invitar a los peatones procedentes del pueblo a dirigirse donde la pasarela es percibida visualmente más espaciosa, sobre el estribo sur. Para reforzar este efecto de atracción, encima de este estribo se dispuso una plataforma parcialmente volada sobre la trinchera de la variante en forma de balcón-mirador. Invitando a los peatones a dirigirse hacia ese punto, pensamos que sería más fácil evitar que éstos se detuvieran en medio de la pasarela, sobre la calzada de la vía, situación ésta que siempre puede dar lugar a ocasiones de peligro y generar una molesta sensación de inseguridad a los conductores que circulan por la variante.
La cimentación del estribo norte se hizo directamente sobre el terreno a través de una zapata superficial. En el estribo sur, en cambio, el cimiento se hizo a través de pilotes de extracción de 45 mm de diámetro y diez metros de profundidad. Éstos están unidos por un encepado sobre el que se dispuso la estructura del estribo, que también hace de soporte de la mencionada plataforma balcón.
La estructura de la plataforma volada es de planta cuadrada de 7.5 metros de lado y se materializa a través de un forjado reticulado metálico, también de acero Corten, formado por unos perfiles en forma de C perimetrales y tres vigas en sección cajón y canto variable, que unen dos de los lados opuestos de este cuadrado. En sentido perpendicular a estas vigas se dispusieron unas viguetas, también de sección en C, sobre las que se apoyó el pavimento de tarima tecnológica. A lo largo de la estructura del tablero también se dispuso el mismo tipo de pavimento, que en este caso se apoya sobre unas viguetas longitudinales de sección en C colocadas sobre las vigas transversales que unen las dos celosías principales.
Además de la construcción del camino y de la pasarela, las obras proyectadas incluyeron la instalación del alumbrado público a lo largo del tramo del itinerario que va desde la calle de Dalt hasta la mencionada plataforma volada. A lo largo del tablero el alumbrado está constituido por unos apliques con tecnología LED de bajo consumo, dispuestos dentro de los cordones superiores de las jácenas, que para tal efecto tienen la forma de U invertida. El resultado de esta disposición es un interesante juego de luces y sombras generado por la interacción de los puntos de luz con la propia estructura metálica. En el tramo del camino entre la calle de Dalt y la pasarela, y también sobre la plataforma volada, el alumbrado viario se resuelve con unas farolas de columna vertical de acero inoxidable con lámparas de halogenuros metálicos. Para los LEDs se eligió una temperatura de color de blanco cálido que resulta muy próxima a la de los halogenuros metálicos, consiguiendo de esta manera una uniforme tonalidad luminosa en el conjunto de la obra.
Los trabajos se completaron con la instalación de las barandillas a lo largo del tablero y en los dos estribos, así como el mobiliario urbano formado por bancos, papeleras y pilonas, estas últimas para evitar el paso de vehículos motorizados por encima de la pasarela.
3. Para acabar
Creemos que con el proyecto de la pasarela y sus accesos hemos mitigado en parte el impacto de la construcción de la nueva variante al poner en valor una zona que hasta ahora tenía un acceso parcialmente restringido, especialmente para las personas con movilidad reducida. El resultado ha sido una obra con una inversión inicial muy limitada y con unos costes de mantenimiento muy contenidos gracias a los materiales y tecnologías empleados.
