| Obra |
Camarín Club Campestre
|
|---|---|
| Arquitectura |
João Diniz
|
| Arquitectos asociados |
Clarissa Bastos, José Baccarini e Igor Hermont
|
| Constructora |
Cavito Engenharia e Tech Engenharia
|
| Período |
Poyecto: 2004 a 2013 / Obra: 2006 (1a etapa) 2013 (2ª etapa / conclusão)
|
| Colaboradores |
Estructura metálca: Montar Engenharia
|
| Sup. construida |
580m2
|
| Materialidad |
Acero 572, perfil laminado Açominas / Peso estructura: 20ton.
|
| Fotografía |
Marcílio Gazzinelli, Isabel Diniz e João Diniz
|
| Web |
www.joaodiniz.com.br
|
El proyecto ofrece varios aspectos y consideraciones importantes relacionadas con la arquitectura y construcción en acero. En tanto resultado final, el proyecto decide invertir algunas de las consideraciones tradicionales de los recintos de vestuarios, habitualmente cerrados sobre sí mismos, y propone una apertura más radical al entorno como una oportunidad de relajarse en sus vistas. Así, el vestuario lejos de esconderse, se exhibe, manejando con delicadeza la relación privilegiada con el entorno y la necesaria privacidad de algunos recintos. Desde el punto de vista de la estructura, la propuesta apela a una solución de marcos confeccionados en acero patinable que quedan a la vista y que salvan grandes luces. Las uniones son soldadas. Desde la perspectiva de la construcción, el proyecto resuelve acertadamente la ecuación de construir “en torno y sobre” un edificio existente conservándolo operativo durante las obras. Esta estrategia demanda algunas consideraciones de salvar grandes luces, lo que se logra muy eficaz y eficientemente con la estructura de acero seleccionada. Finalmente, el proyecto se inserta muy bien en la topografía y el paisaje circundante con una estructura de acero que por color y esbeltez dialoga fluidamente con los árboles y la vegetación existentes. Los volúmenes cerrados, el uso del color, el diseño de los elementos estructurales, todo parece descansar en una armonía simple que no se apoya en excesos ni se hace protagonista solitaria del conjunto. Es una arquitectura medida.
F. Pfenniger
El Club de Campo está en los alrededores de Belo Horizonte entre vegetación, ríos, canchas deportivas y piscinas donde los usuarios se encuentran con el relax y la naturaleza. El antiguo camarín ubicado en el nivel inferior debía ser reemplazado por una nueva construcción que envolviera a la antigua.
Así la nueva estructura y espacio funcional del piso superior envolvió a la construcción antigua, la que sería posteriormente demolida, lo que caracterizó la primera etapa de la obra. Para esto fue necesario un vano libre de 16m en pórticos paralelos de estructuras de vigas mixtas y perfiles laminados de acero patinable que se integrara a la esencia mineral del entorno.
Una característica frecuente de los camarines, que son cerrados y vueltos hacia dentro, fue invertida buscando vistas del entorno durante un masaje, un sauna, una ducha y el ejercicio de los cuerpos y los ojos para encontrar la paz exterior del cielo y los árboles.
