| Obra |
Centro de producción y ensamblaje de motores JLR
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| Arquitectura |
Arup Associates
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| Cliente |
Jaguar Land Rover
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| Ingeniería |
Arup
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| Fotografía |
© Arup Associates / Simon Kennedy
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| Web |
www.arupassociates.com
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Aparte de la organización y flexibilidad del layout del espacio productivo, uno de los grandes temas de la arquitectura industrial es la escala. Otro que se ha ido incorporando en las décadas recientes es la sustentabilidad y eficiencia energética. Todo ello hace parte de las premisas con que se aborda este proyecto que llama la atención por varias cosas, aparte de los grandes números. La planta de naves de grandes luces, extremadamente libre de apoyos y con una estructura que ya visualmente se percibe de extrema ligereza (desconocemos el dato de las toneladas de acero de la estructura), la distribución uniforme de la luz natural (el siempre eficiente recurso de las cubiertas tipo shed cuyo origen se remonta a muchas décadas atrás en la arquitectura industrial), la altura interior, las relaciones visuales y el orden son parte de esta propuesta que apuesta por el blanco extremo. Los cerramientos laterales del edificio no llegan al suelo, dejando una franja acristalada baja que hace visible el proceso productivo y pone el paisaje exterior a escala humana en el interior. Sobre este recorte se sitúa la verdadera dimensión y altura interior del edificio. El uso exacerbado del blanco (hasta la maquinaria es blanca!) cumple la doble función de optimizar el beneficio de la luz natural y extrema la necesaria búsqueda de la limpieza y pulcritud. Si esto en alguna época parecía en las antípodas de la industria, hoy es un recurso observado reiteradamente que también: en la perfección del blanco resaltan las otras notas de color y también las imperfecciones que se deben evitar.
F. Pfenniger
El centro de producción y ensamblaje de motores Jaguar Land Rover (JLR) apela a la experiencia de medio siglo de Arup en el diseño de edificios industriales innovadores. El emplazamiento para esta planta de 900 millones de Libras que emplea a aproximadamente 1.400 personas es en terrenos abandonados en las afueras de Wolverhampton, rodeado por un paisaje ecológico.
El conjunto de edificios de 18,500m2 contiene galpones de producción y ensamblaje de motores iluminados por el norte flanqueados por oficinas, espacios de soporte social y el centro educacional comunitario. La innovación, colaboración y bienestar de las personas en la fábrica está en el centro de su éxito. Borrando las fronteras entre el área de producción y las oficinas a través de la transparencia visual, movimientos despejados y espacios sociales, rompe las barreras de comunicación entre el personal. Los tragaluces orientados al norte proveen espacios iluminados naturalmente a través del complejo lo que, combinado con vistas hacia los paisajes ajardinados del entorno, proveen el respiro para mejorar la salud y productividad personal.
Como parte del interés de JLR en la producción de baja emisión de carbono, el complejo es uno de los mayores en lograr la certificación BREEAM Excelente. Las características de sustentabilidad incluyen ventilación natural, iluminación natural en espacios de producción y oficinas, recuperación de aguas grises y la mayor matriz fotovoltaica sobre cubierta de Gran Bretaña compuesta de 21.000 paneles fotovoltaicos que proveen el 30% de energía del complejo, equivalente a 1.600 viviendas. Flexibilidad y adaptabilidad resiliente son un factor clave para una estrategia de diseño modularizada. La estructura de cubierta de gran luz distanciada a 30m está organizada para otorgar una clara jerarquía a la distribución de servicios altamente modularizada. Esto, incorporado con las formas de cubierta de dientes de sierra (N.d.T: tipo shed) rompe la escala masiva para humanizar el espacio productivo. Diseñado íntegramente en BIM; Arup trabajó en un enfoque único con el equipo de diseño interno de JLR para producir un modelo colaborativo, fluido y coordinado.
